sábado, 31 de mayo de 2008

JUNIO EN EL COLEGIO MAYOR PEÑAFIEL

Nooooooooooooooooooo ya se acerca el mes temido para los universitarios. Es un mes que debería quitarse de los calendarios cuando uno es estudiante. Junio es sinónimo de estudio; de mucho sueño; de nervios; de tragedias en algunos casos y, en otros, de euforia; de terrazas que no puedes pisar porque al día le faltan horas para estudiar, de sala de estudio abarrotada en gente y de apuntes; de risas tontas, de carreras por la escalera y de un largo etcétera que sería interminable intentar agotarlo en esta entrada.
Ayer me tuve que acercar a Valladolid por una cuestión de trabajo y aproveché para darme una vuelta por el Colegio Mayor Peñafiel; entré en la sala de estudio y tuve esa sensación que intenté describir en el primer párrafo. ¡Las horas que eché en ese cuarto!. En esos meses era cómo un "mini campo de concentración"; además había una zona habilitada dentro de la sala de estudio en la que podías entrar pero no salir y con un horario intensivo que, algunos días, era inhumano. Ahora, con la perspectiva que dan los años, agradezco todas esas iniciativas de la dirección del Colegio Mayor Peñafiel porque, gracias ellas, algunos pudimos terminar la carrera. Con estas líneas quiero animar a todos los residentes a que superen con éxito este traumático mes de junio y felicitar al Colegio Mayor Peñafiel porque, después de veinticinco años, sigue siendo fiel a su tradicción.
Un saludo,
Iñaky

sábado, 24 de mayo de 2008

Los Grupos de Musica en el Colegio Mayor Peñafiel

He visto en el blog "La terraza de Peñafiel" una entrada dedicada a una Fiesta de Padres que tuvieron a mediados del mes de abril en el Colegio Mayor Peñafiel. Al curiosear (podría haber utilizado la palabra "ver" pero ciertamenteme interesé antes por las fotos que por el contenido de la entrada) las imágenes que colgaron para acompañar la reseña me hizo gracia ver a Echeve colgado de una guitarra porque retrocedí quince años en el tiempo. Fue un recuerdo muy agradable porque mi cabeza viajó en el tiempo y llegó a una pequeña sala del sótano del Colegio Mayor Peñafiel, cargada de humo y donde no nos podíamos mover mucho porque chocábamos unos con otros. Temas como "Cadillac solitario" de Loquillo o "Déjame" de Secretos o los primeros éxitos de Héroes del Silencio, salían de los acordes de nuestras guitarras. La nostalgia de esos buenos tiempos sigue punzante y los buenos amigos que hice en el Colegio Mayor siguen teniendo un hueco principal en mi cabeza y en mi corazón. Un fuerte abrazo y aúpa.

Fdo.: Nacho

jueves, 8 de mayo de 2008

El volley en PERU

Viendo las fotos que están publicadas en el blog "La Terraza del Colegio Mayor Peñafiel" de un partido de volley ball entre residentes del Colegio Mayor Peñafiel y la Residencia Santa Rosa de Lima, me viene a la memoria la cantidad de partidos jugados en la sierra de Perú. Frases míticas como "Jaime levántala" o "qué lindo punto, Chema" me golpean las sienes recordando las aventuras y, en algunos casos, desaventuras de varios universitarios en la sierra de Curahuasi. Que, para los que no lo sepan, es la capital mundial del anís o, por lo menos, eso decía en el cartel anunciador que nos dió la bienvenida al pueblo, justo antes de pararnos la polícia y pedirnos a todo el grupo la documentación.
Mi imaginación vuela y llega hasta la Plaza de Armas de Curahuasi y veo una red, justo al lado de la escuela, y un hombre de dos metros pegada a ella diciendo (en algunos casos con un poco de vehemencia) que no había tocado la red al saltar. No puedo continuar porque la emoción me embarga y no es bueno vivir de recuerdos. Simplemente me gustaría terminar con una expresión mítica que hemos oido millones de vecer ¡Viva el Perú, carajo!